Desde Fisioterapia de la Serna, queremos hablar de una relación muy importante, LOS ACÚFENOS O TINNITUS Y VIAJAR EN AVIÓN, ya que por trabajo hay gente que vuela ,mucho, especialmente el personal de vuelo.

Los acúfenos, como ya hemos definido en otros post, pueden ser de diferentes tipos, objetivos y subjetivos y se manifiestan como zumbido, pitido, siseo, etc. y de causas diversas, pudiendo tener mucha relación con la articulación temporomandibular (ATM) y la musculatura cervicocraneomandibular que la rodea.

Es un tema más común de lo que parece o de lo que pensamos. En España lo sufren en torno a un 10% de la población y no siempre se necesita un estilo de vida estresante para tenerlo, aunque diversos estudios demuestran que la edad laboral (35-55), es cuando más se produce la incidencia del acúfeno. Es importante acudir a un especialista, como puede ser un otorrinolaringólogo, neurólogo, psicólogos, etc. y cuando tengamos el diagnostico adecuado, podemos acudir a fisioterapeutas expertos, como los fisioterapeutas de Fisioterapia de la Serna, si se precisa tratamiento, ya que tiene una implicación importante sobre el estrés, capacidad de dormir, de concentración, a nivel psicológico, cefalea, hipersensibilidad a sonidos altos, hipoacusia, etc.

Una parte muy importante del oído es la Trompa de Eustaquio, situada en el oído medio, al lado de los huesecillos del oído y cuya función es, entre otras, equilibrar las presión dentro del oído con la presión atmosférica. Por ello, el que ha volado con acúfeno, sabe lo incomodo que es, sobre todo al aterrizar, ya que al descender el avión, va aumentando la presión en cabina, por ello a veces notamos taponamiento o zumbidos y en algunos casos dolor en los oídos, según la gravedad del acúfeno. Estas mismas molestias al volar, sin acúfeno, podemos notarlas.

Por ello, aunque esos cambios de presión, no podemos evitarlos, ni tampoco los síntomas sobre el oído, os damos unas recomendaciones para volar con acúfeno y disminuir lo más posible esos efectos nocivos:

  1. Intentar volar lejos del motor, para disminuir los ruidos.
  2. Abrir la boca al aterrizar y despegar, para favorecer la ventilación del oído, así como hacerlo alguna vez durante el vuelo.
  3. Usar tapones para volar, hay unos especiales que ayudan a regular la presión en el oído medio.
  4. Hacer la maniobra de Valsalva, para igualar las presiones. Consiste en expulsar aire por la nariz, apretándola suavemente, mientras tenemos la boca cerrada.

Aunque esto no solucionará la incidencia de los efectos del vuelo sobre los acúfenos, si que ayuda a mitigarlos, por eso esperamos que os haya ayudado. Y con otro consejos para hilar, podamos disfrutar más de esos viajes, ya sena de placer o trabajo. También esperamos vuestros comentarios.

Desde Fisioterapia de la Serna, esperamos que os sean de utilidad. Para más información, contacta con nosotros en fisioterapiadelaserna@gmail.com.

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